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Cuando los caminos se cruzan

Desde que Zemoga comenzó hace casi 20 años, el enfoque siempre ha sido el mismo: las personas y la calidad.

El sueño, la meta y la visión se dirigían al mismo punto, crear una empresa donde las personas del equipo son la prioridad número uno, el principio y el fin de todo, donde todo es por ellos y para ellos. Al mismo tiempo, que este equipo produce y entrega la más alta calidad en tecnología, innovación y diseño. No es una meta fácil, de serlo, todo el mundo lo haría, y eso en sí mismo fue desde el comienzo su mayor atractivo, lograr lo que nadie más se había atrevido a lograr: una empresa enfocada en el bienestar de su gente y la excelencia para sus clientes.

El enfoque en las personas no puede ser una política o una directriz de la empresa, el enfoque en las personas es un sentimiento. En los valores más íntimos de Zemoga está el honrar a las personas, es esa devoción en el equipo lo que ha marcado una diferencia. Esa es nuestra mayor fortaleza, saber que estamos juntos en esto, que todo el mundo cuenta, acá nadie es un número más y todos hacemos parte de la construcción de la empresa. Aprendimos que enaltecer a las personas no es algo que viene sólo de la compañía sino del equipo mismo. Creemos en las personas, incluso en momentos en que dudan de sí mismos. Tener un enfoque en la gente es empoderarlos para que todos expresen lo que piensan. Oirlos, entenderlos, tenerlos en cuenta y aplicar todas sus contribuciones como pieza fundamental del crecimiento y de la estructura de la compañía. Tener un enfoque en las personas no es sólo tener un paquete de beneficios, sino pensar en cómo todos y cada uno de los beneficios van a tener un impacto positivo en las personas y en sus familias. Es acompañar a las personas en sus momentos más felices y estar muy cerca en los momentos difíciles, es celebrar la llegada de un nuevo hijo o entender con cariño y empatía la pérdida de un ser querido. Tener un enfoque en las personas es no dejarlo en palabras y demostrarlo con hechos, no se puede forzar, no se puede disimular y no se puede aparentar.

El enfoque en la alta calidad es un proceso que se va perfeccionando con el tiempo. Va mucho más allá de líneas de código sin bugs o de diseños que sean pixel-perfect. El enfoque en calidad debe significar una experiencia para nuestros clientes, es poder transmitirles el sentimiento de confianza que con Zemoga están en las mejores manos, que su proyecto nos lo tomamos como propio y que compartimos sus objetivos y sus metas como si fueran las nuestras. La calidad se ve reflejada en las comunicaciones, en una llamada, un correo o una reunión en las que nos sienten como parte de su propio equipo, porque eso es lo que somos. La calidad es una sincronización, es orquestar a los equipos para buscar dinámicas de trabajo eficientes y comprometidas. Es un perfecto manejo de las expectativas, la calidad es no caer en el error de decir que “sí” a todo. Tener un enfoque de calidad es lograr demostrar que el mejor tributo que le podemos hacer a nuestro clientes es buscar el crecimiento profesional de los equipos, entrenarlos, guiarlos y acompañarlos en el camino de buscar ser una mejor versión de sí mismos. La calidad se ve reflejada cuando se empodera a un equipo a cuestionar, a preguntar, a criticar y a opinar, eso es lo que realmente significa ir más allá por un cliente. 

Desde el comienzo Zemoga entendió que la calidad y el enfoque en las personas es más importante que el tamaño. Este proyecto no se trata de llenar plazas y poner más gente sólo por el hecho de crecer. Se trata de asegurar que cada persona que se une al equipo es un perfil que está alineado con los valores de la empresa, y eso va más allá de unas capacidades técnicas o de diseño. Si algo ha demostrado Colombia es que su gente está llena de talento, de ganas, de cariño por lo que hacen. Entre Zemoga y las personas de su equipo existe una relación que va más allá de lo laboral, cuando los caminos se cruzan empieza un camino, una historia, un viaje a través del tiempo que deja una huella indeleble en las personas y en la empresa. El proceso de pruebas y entrevistas para entrar a Zemoga es de dos vías, es una comunicación bilateral en la que hacemos nuestro mejor esfuerzo para mostrarles a las personas quienes somos, de dónde venimos y para dónde vamos. Es abrirles la puerta de nuestra casa para que ellos también decidan cual es el momento de cruzarla, porque sabemos que una vez se cruza esta puerta encuentran un mundo infinito de posibilidades.

About the author

With over 16 years of experience, Carlos oversees finance, HR, IT and marketing for Zemoga. He has helped scale the company maintaining it’s amazing unique culture and quality delivery.